A pesar de que estuvo lluviendo durante buena parte de la tarde-noche del jueves Santo, a las doce de la noce lucía un cielo estrellado que acompañó durante todo el recorrido al Stmo. Cristo de la Sangre.
Como en años anteriores hubo bastante público en la salida y un nutrido grupo de fieles nos acompañó durante todo el tiempo que duró la salida procesional.
Os dejamos a continuación algunas fotos de lo vivido en la madrugada de Jesús:
La luna llena brilla hermosa sobre la cruz del Stmo. Cristo de la Sangre
Uno de los momentos más bellos y dificultosos del recorrido: el paso por el Arco de Belén cuesta arriba
Los nazarenos dieron todo un ejemplo de seriedad y penitencialidad en la calle
El Cuerpo de acólitos acompañó en todo momento la delantera del paso con verdadera devoción y bien hacer
Se acondicionó el paso para que la imagen del Stmo. Cristo bajara aún más dadas las nuevas dimensiones de la altura del mismo.